miércoles, 10 de diciembre de 2008

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El domingo se esfumaba y con los ultimos rayos del sol dominical surgia en mi esa extraña sensación de depresion ,nada tragica en realidad , propia del después de cualquier momento de euforia o de expectativa exagerada .Otra vez en el fin de semana mi vida no habia dado ese magico giro que tanto esperaba, nadie habia aparecido para salvar la vida,yo no me habia salvado, salvando a nadie y vos tampoco. Tus mensajes seguian sonando lejanos , llenos de justificaciones y explicaciones que yo no esperaba ni merecia y ni suiquiera te habia pedido , después de todo , eramos dos completos extraños. Vos tampoco me ibas a salvar la vida,( por lo menos este fin de semana). En un momento de irracionalidad imperdonable te envie un sms equivocado, demasiado sincero y agresivo e inmediatamente borre tu numero y todos los mensajes que nos habiamos mandado. Asi cortaba cualquier posible contacto con vos, me corté los dedos - pensaba. Obviamente esto fue un error estrategico (el mensaje, no el cortarme los dedos)en nuestro vinculo , igual nunca fui perfecto , mas bien todo lo contrario. Mi espiritu (auto) destructivo otra vez me habia jugado una mala pasada , yo esperaba poder recuperar tu numero al recibir un mensaje tuyo , pero todavía no ha sucedido…